Crónicas de una pandemia

Dios de todos, un susurro bastará para entender el designio de vida, aunque no soy digno de escuchar, pero un gesto bastó para sanarme; con defectos y virtudes, el pasado y el presente, el tiempo y espacio, el dolor y la alegría en una época de tantos contrastes divagan en mi ser; hay un camino aquel que fue revelado, aquel que no he caminado y que indiscutiblemente tendremos que transitar, quedarán huellas, sanarán cicatrices y qué vamos a dejar.

Año 2020, tragedia y dolor embargan nuestros corazones, Crónicas de un Pandemia alteran nuestras vidas, nadie lo había vivido, cómo imaginarnos que nos desbastaría como sociedad; encontrando contrastes de miseria humana por el vil metal y héroes de bata blanca que entregaron sus vidas al cuidado del paciente; familias enteras se perdieron, se extinguieron en la derrota de los temores por una fiebre irresistible, sin olor, ni sabor, covid-19 la llamaron, ahí cayeron hermanos, amigos y desconocidos que te dolieron; el pueblo se solidarizó desde casa por el temor de también partir; hay excepciones  de los que te aman y te aprecian, padres y madres se lanzan al precipicio, al rescate sin mascarilla eres su propia vida; algunos no resisten y sin despido parten en una bolsa plástica por culpa del coronavirus sin honor. Las restricciones y dificultades económicas en desesperanza por el quédate en casa y cómo sobrevivir en la desesperación de una mesa sin pan después de haberlo perdido todo.

Desde la ventana trasera observo el sol radiante, las aves anuncian el amanecer, son la recompensa de que me llegará mi nuevo día, figuras en el firmamento en las faldas de la cordillera me escoltan a acampar; mis emociones me transportan a aquellos días de enfermedad con el encuentro profundo de aquel que me dejó plantado, aun no era el invitado a la fiesta, días de angustia y desesperación fueron el aprendizaje de no estar solo y que ese beso en la frente que me pide todas las noches y esa señal de la cruz que hace en mí es el propósito de permitirme seguir aquí.